Motín de periodistas en el Congreso

El Congreso vivió este martes un nuevo episodio de tensión. Bertrand Ndongo, de Periodista Digital, intentó preguntar durante la rueda de prensa de Sumar sin tener el turno de palabra. Eso motivó que la diputada de Sumar Verónica Martínez decidiera dar por concluida la comparecencia.

Un grupo de periodistas, indignados por lo que había pasado, se reunió para tomar una decisión: no asistirían al resto de declaraciones de los portavoces parlamentarios. De esa manera, tratan de presionar para que se acelere la reforma del reglamento que permitirá retirar sus acreditaciones de prensa a ciertos periodistas. El portavoz del PSOE, Patxi López, avanzó que la proposición de ley llegará la próxima semana a la Mesa de la Cámara baja.

Una periodista de la Agencia EFE se disponía a preguntar a Martínez sobre la reforma laboral, que ya se tramita en el Congreso. Ndongo la interrumpió para preguntar sobre la exvicepresidenta valenciana Mónica Oltra. La diputada de Sumar acababa de enviarle «un mensaje de solidaridad» tras la decisión de la Audiencia Provincial de Valencia de mantener su procesamiento por el supuesto encubrimiento de los abusos de su marido, que fue condenado a cinco años de prisión.

Ndongo insistió en formular su pregunta sobre la posición de Sumar sobre la menor tutelada que sufrió los abusos del exmarido de Oltra. «Ustedes que son tan feministas miraban para otro lado», le reprochó el comunicador de Periodista Digital. Una responsable de prensa de la formación que lidera Yolanda Díaz le pidió «respeto» porque no estaba en el uso de la palabra. E insistió: «Y ahora las preguntas de los periodistas de verdad». La diputada también intervino en la polémica rogándole que se callara, aunque para ella solo era «un ruido de fondo».

Retirar acreditaciones

La insistencia de Ndongo motivó que Martínez diera por concluida la rueda de prensa sin atender preguntas, que sí contestó en privado. Estos momentos de tensión se han convertido en habituales en el Congreso, después de que los portavoces de diversos partidos se nieguen a responder preguntas de comunicadores acreditados. Una polémica que divide a los profesionales. Sus defensores han liderado ya varias protestas para acelerar la reforma del reglamento, lo que permitiría retirar las autorizaciones a aquellos medios que les molestan.

-Patxi López avanza que la impulsarán la próxima semana tras el último encontronazo en la sala de prensa

Tras el último incidente, un grupo de periodistas se reunió y acordaron que no acudirían al resto de comparecencias del día. Los portavoces las mantuvieron, aunque con escaso público. La intención era instar a que se aceleren los trámites para reformar el reglamento. El portavoz socialista recogió el guante. «La semana que viene vamos a traerla, PSOE y Sumar, a ver si conseguimos de una vez impedir este tipo de actividades», afirmó López tras solidarizarse con los supuestos perjudicados.

«Son activistas de ultraderecha que se dedican a amenazar a aquel que no comulga con sus planteamientos. Se comportan tanto aquí como en la calle como auténticos matones de patio de colegio», afirmó López. E insistió: «Esta gente acaba de reventar una rueda de prensa y no se merece más calificativo que el de fascista».

El altercado de este martes también se ha discutido en la Junta de Portavoces. Los representantes del PP, Miguel Tellado, y de Vox, Pepa Millán, han hablado al final de la reunión y han asegurado que no participarán en una censura a ningún medio y que lo que molesta a algunos partidos son las preguntas incómodas. Por su parte, la Asociación de Periodistas Parlamentarios (APP) también emitió un comunicado donde rechaza comportamientos que «distorsionan el derecho a recabar y trasmitir información veraz».

La APP considera que actitudes como las de Ndongo, pero también la de otras personas acreditadas, «dificulta» su trabajo y «perturba» el buen clima. Para evitarlo reiteran «la necesidad» de que las Mesas del Congreso y del Senado «tramiten con máxima urgencia» la proposición de ley para la reforma del reglamento. En su opinión, estas establecen medidas de comportamiento «sin que conlleve limitar, restringir o menoscabar el derecho de los medios». Sin embargo, para otro grupo de periodistas, la medida supone «callar y vetar a profesionales críticos» con el Gobierno.

Como avanzó este diario, la proposición de ley de reforma del reglamento pretende cambiar los criterios de acceso de los medios de comunicación que cubren la información parlamentaria. Impulsada por el PSOE y respaldada por siete grupos, incorpora la posibilidad de que un denominado Consejo Consultivo de Comunicación Parlamentaria sea el que proponga la adopción de sanciones. El texto también contempla la obligación de los medios de firmar las publicaciones que reflejan la infracción, a riesgo de ver retirada su credencial para poder acceder a las dependencias de la Cámara baja.

Texto de: El Voyeur (TheObjetive)